Para salvaguardar nuestro futuro y proteger nuestro planeta para que pueda ser disfrutado por las generaciones venideras, debemos trabajar juntos.

Es por eso que, junto con nuestros socios en todo el mundo, estamos celebrando el Día Mundial de la Normalización y todo el sistema de normas, que se basa en la colaboración. En un mundo donde las diferencias con demasiada frecuencia nos dividen y obstruyen el progreso, defendemos el diálogo, la creación de consenso y la garantía de que se escuchen todas las voces.

Además de fomentar un entorno colaborativo e inclusivo, las propias normas proporcionan soluciones prácticas a problemas del mundo real, como los que están en el corazón de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS).

Los ODS ofrecen un plan compartido para la paz y la prosperidad de las personas y el planeta. Cubren muchas áreas y, en casi todos los casos, hay un papel para las normas técnicas.

El logro de los ODS requerirá la cooperación de muchos socios públicos y privados, y el uso de todas las herramientas disponibles para difundir las mejores prácticas, incluidas las normas internacionales y la evaluación de la conformidad.

Es por eso que ISO y sus miembros, junto con nuestros socios en la Cooperación Mundial de Normalización, la IEC y la UIT, están utilizando el Día Mundial de la Normalización para acelerar la acción global colectiva a través de normativas.