Este documento contiene directrices para el desarrollo y la ejecución de proyectos que pretenden utilizar aguas residuales tratadas (ART) para el riego y considera los parámetros de clima y suelo. El propósito de este documento es proporcionar orientación sobre todos los elementos de un proyecto que utilice ART para el riego restringido y no restringido, incluyendo el diseño, los materiales, la construcción y el rendimiento, cuando se utiliza para lo siguiente: − riego de cultivos agrícolas; − riego de jardines y zonas paisajísticas públicas y privadas, incluidos parques, campos deportivos, campos de golf, cementerios, entre otros. Estas directrices pretenden proporcionar asistencia en beneficio de los usuarios de las aguas residuales para el riego. Las directrices se refieren a los rangos generalizados y comunes de la calidad del agua, más que a excepciones o casos únicos, y están destinadas al uso de los profesionales, como las empresas de riego (diseñadores y operadores), los funcionarios o asesores de extensión agrícola, las compañías de agua (diseñadores y operadores), las autoridades locales y las empresas de suministro de agua. El uso de estas directrices por parte de los usuarios podría requerir especificaciones adicionales. Ninguna de las partes de este documento está destinada a ser utilizada con fines de certificación. Estas directrices sugieren los parámetros de calidad de las ART. Estos parámetros incluyen lo siguiente: − parámetros agronómicos: nutrientes (nitrógeno, fósforo y potasio), factores de salinidad (contenido total de sal, concentración de cloruro, boro y sodio) y concentración de metales pesados; − presencia de patógenos. Cada uno de estos parámetros puede tener posibles impactos en los cultivos, el suelo y la salud pública. Las directrices analizan la posibilidad de prevenir la adición de contaminantes durante la producción de aguas residuales y la capacidad de removerlos durante el transcurso del tratamiento. Los contaminantes emergentes (como los productos farmacéuticos y los residuos de productos de cuidado personal) quedan fuera del ámbito de este documento. El proyecto debería diseñarse de acuerdo con la calidad sanitaria de las aguas residuales tratadas para evitar la transmisión de enfermedades por los agentes patógenos del agua. Se recomienda el uso de estas directrices para garantizar la coherencia dentro de cualquier organización que se dedique al uso de aguas residuales tratadas. Estas directrices proporcionan la base para un diseño, operación, monitoreo y mantenimiento conscientes desde el punto de vista de la salud, hidrología, ambiente y agronómico de un sistema de riego que utilice aguas residuales tratadas.