1.1 Esta guía cubre los procedimientos estándar para la evaluación sensorial cuantitativa de la intensidad olfativa percibida de los malos olores con el fin de evaluar la eficacia de la reducción de los malos olores de los productos de consumo, incluyendo, entre otros, el cuidado del aire, el cuidado de los tejidos, el cuidado del hogar, el cuidado de las mascotas y productos similares. 1.2 Esta guía no pretende cubrir la desodorización axilar; consulte en su lugar la Guía ASTM E1207. 1.3 Los malos olores pueden ser de origen natural o sintético. 1.4 Esta guía es un compendio de información o una serie de opciones que no recomienda un curso de acción específico. El usuario de esta guía es responsable de identificar el diseño de ensayo más apropiado y de utilizar las herramientas estadísticas adecuadas para abordar el diseño experimental. 1.5 Esta guía está diseñada para orientar en la formulación y desarrollo de nuevos productos, así como en cuestiones de control de calidad. 1.6 El alcance de esta guía no incluye todas las orientaciones necesarias para respaldar las reclamaciones. Para más orientación, el investigador puede consultar la Guía ASTM E1958. El uso de los métodos descritos en esta guía puede utilizarse como parte de una estrategia integral de apoyo a las alegaciones para tipos de alegaciones técnicas (como las alegaciones de que el producto creará un cambio sensorial cuando se utilice en el mal olor). Sin embargo, esta guía no aborda otros elementos importantes de la estrategia de apoyo a las alegaciones, incluida la determinación de los requisitos de confianza estadística, o la determinación de la relevancia para el consumidor de los datos obtenidos, como se discute en el apartado 1.7. 1.7 La comprobación de los productos diseñados para reducir los malos olores a través de ensayos sensoriales, tal y como se describe en la presente Guía, puede aportar apoyo técnico a las declaraciones de eficacia de los productos. Los métodos descritos en esta guía -aspirantes con agudeza sensorial identificada y entrenados, malos olores que pueden ser creados en laboratorio o sintéticos, y la exposición controlada a los malos olores en un ambiente interior controlado de la investigación- pueden ofrecer resultados con una alta validez interna. La validez interna se refiere a los estudios diseñados de manera que se controlen o gestionen las variables que pueden oscurecer el hallazgo de un efecto. Es importante reconocer que la validez interna no asegura la validez externa. Una estrategia de apoyo sólida para una declaración de eficacia de mal olor es más fuerte con ensayos adicionales de que el efecto sensorial es perceptible para el consumidor. Dichos ensayos de la eficacia de la reducción de los malos olores del producto pueden obtenerse, por ejemplo, de estudios en los que los consumidores actúan como evaluadores, o en los que el producto se utiliza para reducir los malos olores en un entorno más representativo (por ejemplo, en el hogar). 1.8 Esta norma no pretende abordar todos los problemas de seguridad, si los hubiera, asociados a su uso. Es responsabilidad del usuario de esta norma establecer prácticas adecuadas de seguridad, salud y medio ambiente y determinar la aplicabilidad de las limitaciones reglamentarias antes de su uso. En el capítulo 6 y en el apartado X3.6.3.7 se dan declaraciones de precaución específicas. 1.9 Esta norma se ha elaborado de acuerdo con los principios reconocidos internacionalmente sobre normalización establecidos en la Decisión sobre los Principios para la Elaboración de Normas, Guías y Recomendaciones Internacionales emitida por el Comité de Obstáculos Técnicos al Comercio (OTC) de la Organización Mundial del Comercio.